INGRID BETANCOURT
LA BELLEZA DEL PENSAMIENTO
Hacía mucho tiempo que no se sentía un discurso de tanta profundidad y peso como el de Ingrid Betancourt al recibir recientemente el Premio Príncipe de Asturias de la Concordia en Oviedo.
Estamos talmente hartos de oir banalidades, que sentir las palabras de Ingrid Betancout ha sido como una especie de regalo para los oídos y la mente,un bálsamo anímico.
El mundo se puede aún considerar hermoso si existen todavía personas tan bellas sea por dentro que por fuera.
Ante todo es admirable su generosidad y su capacidad de perdonar a quiénes por largos años la han tenido secuestrada en la selva en condiciones infrahumanas. Por eso sus palabras tienen tanta credibilidad y están lejos de la retórica. Sobre todo allá donde dice “Resignarse es morir un poco,es no hacer uso de la posibilidad de escoger,es aceptar el silencio”. Ingrid Betancourt encuadra éste discurso en el Holocausto hebreo perpetrado por Hitler durante la Segunda Guerra Mundial y que costó la vida a seis millones de judíos,hombres,mujeres y niños,gasificados en los campos de exterminio de los nazis.
Ha querido recordar como “al partir para el infierno,cuando fueron sacados de sus casas los vecinos no hicieron nada”.
Lo ha dicho con lágrimas en los ojos,como si éstos tristes acontecimientos hubieran ocurrido ayer mismo.
Ella invita a no mirar en silencio sin hacer nada a todos los derechos humanos pisoteados también hoy día sin que los gobiernos democráticos “ hagan nada”,ni tampoco “ hagan nada” los ciudadanos.
Podemos recordar aquí los miles de chinos disidentes políticos que son ejecutados mientras aplaudimos los Juegos Olímpicos,las mujeres musulmanas condenadas a muerte con lapidación en algunos países musulmanes mientras el Gobierno de España propone la Alianza de Civilizaciones,a los muchos ciudadanos del mundo a los que se aplica la pena de muerte en países considerados muy civilizados,a los que son encarcelados, por ejemplo en Cuba, por ser de la oposición,a los que están secuestrados en la selva en Colombia por ser democráticos y no casarse con la Revolución propugnada por la guerrilla,etc...
Pues bien,la hermosa mujer con cara de Madonna del Renacimiento Italiano,nos llama a todos a combatir ese conformismo,a romper ese muro de conformismo que nos envuelve,a ser capaces de dar la cara ante la injusticia y la barbarie y a no guardar silencio. Hagamos algo siempre que nuestra conciencia nos lo dicte. Tengamos el coraje de hacer valer nuestra opinión aunque vayamos contracorriente. Aunque sea incómodo. Aunque los que callan nos miren mal. Aunque no estemos de moda.
LA BELLEZA DEL PENSAMIENTO
Hacía mucho tiempo que no se sentía un discurso de tanta profundidad y peso como el de Ingrid Betancourt al recibir recientemente el Premio Príncipe de Asturias de la Concordia en Oviedo.
Estamos talmente hartos de oir banalidades, que sentir las palabras de Ingrid Betancout ha sido como una especie de regalo para los oídos y la mente,un bálsamo anímico.
El mundo se puede aún considerar hermoso si existen todavía personas tan bellas sea por dentro que por fuera.
Ante todo es admirable su generosidad y su capacidad de perdonar a quiénes por largos años la han tenido secuestrada en la selva en condiciones infrahumanas. Por eso sus palabras tienen tanta credibilidad y están lejos de la retórica. Sobre todo allá donde dice “Resignarse es morir un poco,es no hacer uso de la posibilidad de escoger,es aceptar el silencio”. Ingrid Betancourt encuadra éste discurso en el Holocausto hebreo perpetrado por Hitler durante la Segunda Guerra Mundial y que costó la vida a seis millones de judíos,hombres,mujeres y niños,gasificados en los campos de exterminio de los nazis.
Ha querido recordar como “al partir para el infierno,cuando fueron sacados de sus casas los vecinos no hicieron nada”.
Lo ha dicho con lágrimas en los ojos,como si éstos tristes acontecimientos hubieran ocurrido ayer mismo.
Ella invita a no mirar en silencio sin hacer nada a todos los derechos humanos pisoteados también hoy día sin que los gobiernos democráticos “ hagan nada”,ni tampoco “ hagan nada” los ciudadanos.
Podemos recordar aquí los miles de chinos disidentes políticos que son ejecutados mientras aplaudimos los Juegos Olímpicos,las mujeres musulmanas condenadas a muerte con lapidación en algunos países musulmanes mientras el Gobierno de España propone la Alianza de Civilizaciones,a los muchos ciudadanos del mundo a los que se aplica la pena de muerte en países considerados muy civilizados,a los que son encarcelados, por ejemplo en Cuba, por ser de la oposición,a los que están secuestrados en la selva en Colombia por ser democráticos y no casarse con la Revolución propugnada por la guerrilla,etc...
Pues bien,la hermosa mujer con cara de Madonna del Renacimiento Italiano,nos llama a todos a combatir ese conformismo,a romper ese muro de conformismo que nos envuelve,a ser capaces de dar la cara ante la injusticia y la barbarie y a no guardar silencio. Hagamos algo siempre que nuestra conciencia nos lo dicte. Tengamos el coraje de hacer valer nuestra opinión aunque vayamos contracorriente. Aunque sea incómodo. Aunque los que callan nos miren mal. Aunque no estemos de moda.
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