GOBIERNO BERLUSCONI DE EXTREMA DERECHA

-CAUSA VERGÜENZA A LA GENTE DECENTE LA LEY ANTI-INMIGRACIÓN ITALIANA PROMOVIDA POR BERLUSCONI.
-MENOS MAL QUE QUEDAN EL PRESIDENTE DE LA REPÚBLICA GIORGIO NAPOLITANO Y EL PRESIDENTE DE LA CÁMARA GIANFRANCO FINI EN DEFENSA DE LOS DERECHOS FUNDAMENTALES DE LAS PERSONAS.
-LA LEGA NORD ES UN PARTIDO DE ULTRADERECHA RAZISTA.
-EN ESPAÑA NO SE PERSIGUE A LOS DELINQUENTES,SE PERSIGUE A LOS POBRES “SIN PAPELES” A LA PUERTA DE LOS COMEDORES SOCIALES.
Verdaderamente a los italianos se nos cae la cara de vergüenza ante las “patrullas de vigilancia ciudadana”contra los inmigrantes “ilegales”.
El truco ha consistido en legiferar considerando LA CLANDESTINIDAD UN DELITO Y EL CLANDESTINO UN DELIQUENTE.
En base a ésta ley ayudar a un clandestino es ser cómplice de un delito. La acogida cristiana en comedores de caridad sería un acto de ayuda al delito, como también en España el otro día hemos podido leer en los periódicos que la policía detenía a “ilegales”en la puerta de un comedor de las Hermanas de la Caridad.
Parece mentira que Italia, que siempre ha sido un país ejemplar y estricto en la defensa de los derechos humanos,se haya degradado hasta éste punto.
El ministro español del Interior Rubalcaba se está comportando en forma horrible con los inmigrantes pobres tendiéndoles trampas para conejos a las puertas de los conventos.
En Europa comienza a sentirse el olor pútrido del fascismo y del nazismo. Si los ciudadanos no nos rebelamos podemos revivir experiencias muy tristes de un pasado que creíamos sepultado.
EL FUTURO SE PARECE MUCHO AL PASADO.
Los grupos de “ciudadanos vigilantes”se parecen mucho,pero mucho,a las “camisas negras fascistas” y a las “camisas pardas”de los nazis.
El Presidente de la República Italiana Giorgio Napolitano ha mostrado su desacuerdo afirmando que a los inmigrantes hay que integrarlos y no considerarles criminales,así mismo el presidente de la Cámara de Diputados Gianfranco Fini ,ha recordado cuando los italianos emigraban y eran despreciados y en algunos sitios de Bélgica y Alemania en los años 50 había bares donde se ponían letreros en la puerta con escrito PROHIBIDA LA ENTRADA A LOS ITALIANOS.
Debemos vigilar mucho en Europa para que no degrade el sistema de respeto de los derechos humanos.
Al mismo modo debemos pedir a aquellos que vienen el respeto de nuestras leyes y forma de vida desde un plano de igualdad.