-ES UN POLÍTICO QUE NO SOPORTA LA CRÍTICA PARLAMENTARIA QUE RECUERDA SIEMPRE MÁS A PUTÍN
Creo que todos los españoles estamos asombrados de la grosería y mala educación con que Mariano Rajoy respondió a la líder de UpyD Rosa Díez en una sesión de control en el Parlamento. La verdad es que no es la primera vez que responde groseramente cuando no le gusta la pregunta.
Defecto añadido a su alergia de dar explicaciones de su política a los españoles a los que se dirige siempre después de recibir la crítica por no comparecer no solo de la oposición sino también de los medios e incluso de los mismos de PP.
Si Zapatero se distinguió por ser un incompetente con aires de “iluminado”, de Rajoy por lo menos de momento- más tarde se verá-es uno que hace siempre lo contrario de lo que dice, es un arrogante en su forma de tratar a aquellos que con toda legitimidad, le piden explicaciones y por si fuera poco responde en mal modo y con chulería de politicante de pueblo no en consonancia con su título de registrador de la propiedad y más propia de un cargador de muelle de su Galicia natal.
Para quien escribe ésta nota, ha sido una auténtica sorpresa éste hombre que después del “desastre Zapatero” ilusionó a muchos de aquellos españoles que le dieron una mayoría absoluta confiando en que sacaría adelante el país con competencia y moderación.
Yo, desde luego, no lo veía como un gran líder pero si pensaba que era moderado y todo un señor, con los modales típicos de un conservador.
Sin embargo- !Oh, sorpresa!- se está demostrando nada líder, poco competente e incluso poco señor. Increíble.
Nadie niega que España está viviendo momentos dramáticos pero a un líder auténtico se le reconoce más que nunca en los momentos de dificultad, en la capacidad de afrontar los problemas con serenidad y sin perder los nervios.
Eso genera confianza en la gente.
Recordemos a Winston Churchill y su capacidad de levantar el ánimo del pueblo inglés bombardeado por los nazis.
Pienso por ejemplo en un ejemplo más cercano en el tiempo, Mario Monti, el presidente del gobierno italiano, al cual no le he visto nunca perder los papeles en situaciones tan difíciles como las españolas.
No sé si es consciente Mariano Rajoy de estar decepcionando a los españoles no solo por sus divagaciones y falta de resultados sino también por sus modelos de picapedrero, con perdón de los picapedreros.
En fin, esperemos que recapacite y sepa afrontar con mejor talante a la gente y comunicarse con mayor fluidez con el pueblo español.
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