EN ESPAÑA SE INCENDIAN LAS CALLES

-LOS CIUDADANOS GRITAN SU DESESPERACIÓN POR LAS CALLES.
-MUCHOS POLÍTICOS INCENDIARIOS AHORA GRITAN !FUEGO! ABRAZANDO LA FILOSOFÍA DEL TANTO PEOR, TANTO MEJOR.
-ESPAÑA NECESITA UN GOBIERNO DE CONCENTRACIÓN NACIONAL O SI LOS POLÍTICOS NO ESTÁN A LA ALTURA DE LAS CIRCUNSTANCIAS, YA LA INTERVENCIÓN EUROPEA.

La situación que está viviendo España es tan grave que resulta incalificable. Hace ya mucho tiempo que vamos hablando de crisis, pero ahora la palabra crisis se podría considerar un eufemismo.
Para ser más realistas habría que decir lento hundimiento aunque por caridad de patria seguiremos hablando de crisis.
Una crisis que parece la tormenta perfecta porque a la crisis en sí misma instalada en el corazón del país desde hace años sin que nadie quisiera verla, ni siquiera nombrarla, ahora se añade una especie de locura colectiva de no aceptación ni de la enfermedad ni siquiera de ningún tipo de medicina.
El gobierno Rajoy, que en honor de la verdad hay que decir que ha recogido una España en coma profundo, lo ha dicho claramente que no hay donde elegir entre LO MALO Y LO MUY MALO, cosa bastante real por desgracia.
No creo que un gobierno Rubalcaba hiciera algo diferente de lo que está haciendo Rajoy, pero quizá él no tuviera la “tormenta perfecta”, como no la tuvo Zapatero cuando tuvo que tomar decisiones tan duras como las que está tomando Rajoy.
No parece de recibo que aquellos que causaron éste incendio, es decir, el anterior gobierno y las comunidades autónomas de todos los colores, caldo de cultivo del robo y el despilfarro, sean ahora quienes se niegan a hacer cualquier tipo de sacrificio.
Digamos que LA CASTA intocable se niega a aceptar cualquier tipo de responsabilidad ni sacrificio.
Quizá el mayor error del gobierno Rajoy sea el de no haber cortado por lo sano cualquier tipo de subvención a todos los partidos, (el suyo incluido), sindicatos, organizaciones empresariales, televisiones públicas y demás entes inútiles que son la ruina y catástrofe de éste país.
Por ahí hubiera debido haber empezado, quizá los ciudadanos hubieran comprendido mejor los sacrificios que se les piden.
Pero claro, es difícil quitar el turrón y los Reyes a los niños, cuando no se han acabado éstas subvenciones, ni se recorta por la mitad el escandaloso número de políticos que hacen de chupópteros de éste país y que triplica el alemán o el de Estados Unidos.
La indignación de los ciudadanos se veía que iba a estallar de un momento al otro, y efectivamente se ha desparramado como gasolina incendiada por las calles.
Era inevitable que sucediera.
Indigna en ésta situación la total irresponsabilidad de los socialistas y ciertos nacionalismos que a la vista del fuego en vez de correr con el agua, echan más bidones de gasolina indiferentes al hundimiento de España.
Personalmente estoy convencida de que no hay otra que la INTERVENCIÓN de la Unión Europea al punto en que estamos, y que quizá la única solución para evitarlo sería un GOBIERNO DE CONCENTRACIÓN NACIONAL.
Pero naturalmente un gobierno de concentración nacional que apoyara todo el parlamento es bastante impensable en un país cuya clase política ha abrazado la filosofía del TANTO PEOR, TANTO MEJOR.
Ciertamente la situación no puede ser peor y si los políticos no tienen un mínimo sentido de responsabilidad, puede ocurrir de todo no excluida una solución autoritaria de derechas o de izquierdas como en los años 30 del pasado siglo.
Y mientras tanto unos ciudadanos protestan en las plazas y otros protestamos por dentro y a la vez tememos lo que pueda ocurrir.