LOS NIÑOS NO PUEDEN SER LAS VÍCTIMAS DE LAS GUERRAS ORGANIZADAS POR LOS MAYORES.
Se acerca de nuevo el invierno. Europa no ha resuelto en forma adecuada el problema de los refugiados de guerra, aunque también debemos de reconocer que no es problema de fácil solución.
quién escribe estas líneas siempre ha afirmado que no se resuelve el problema de Siria trasladando Siria a Europa.
La ONU, RUSIA, ESTADOS UNIDOS, la UE y la LIGA ÁRABE deben de intervenir directamente para atajar el problema, o con una Conferencia de Paz que sirva para algo y no para salir en la foto, o acordando entre todos una intervención armada en tierra que termine con el conflicto.
La guerra de Siria dura ya cinco años y los habitantes de esa región están destrozados, desatendidos, bombardeados, sitiados... y los que huyen arriesgando la muerte en el Mediterráneo o encerrados en campos inhabitables.
A TODAS ESAS PERSONAS HAY QUE DARLES UNA PAZ.
Ellos tienen derecho sobre todo a volver a su tierra y es lo que afirman que quieren hacer pero no pueden.
POR OTRA PARTE ESTÁN LOS NIÑOS.
Esos niños inocentes que malviven en medio a riesgos de enfermedad, que están mal vestidos, mal nutridos, con escasa asistencia sanitaria y sin acceso a la educación.
Resolver este problema es de la máxima urgencia y por lo menos los gobiernos junto a las ONGs. deberían organizar planes de acogida temporal entre las familias europeas y de otros países que VOLUNTARIAMENTE se presten para que estos niños puedan tener un hogar y asistir a clase sin perder el contacto con la propia familia original en modo de que puedan volver con ella apenas las circunstancias lo permitan.
Los niños no pueden ser la víctimas de las guerras de los mayores.
Ni los mayores podemos cruzarnos de brazos y no hacer nada.
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