miércoles, 19 de agosto de 2015

UNA EUROPA SIN POLÍTICA INTERNACIONAL CON LA GUERRA EN EL PATIO DE SU CASA



-EUROPA ES UN PRÍNCIPE SIN CETRO, CORONA NI ESPADA.

-LA GUERRA TERRORISTA LA TENEMOS EN EL PATIO DE CASA.

Es altamente decepcionante el parón que ha dado la política de construcción de la Unión Europea. Quienes desde el inicio soñábamos con una Europa en paz, fuerte y unida no pensábamos a ésta Europa débil, dividida, egoísta.

Había muchos de nosotros de ideología federalista europea que cuando aún no existía la Unión Europea y había solo el Mercado Común Europeo, decíamos de aspirar a algo más que una Europa de los Mercaderes, queríamos una Europa de los CIUDADANOS, con su parlamento elegido a sufragio universal, su unión política con un verdadero gobierno europeo elegido no a través de los gobiernos sino por sufragio universal como en los Estados Unidos, con una moneda única, un mercado único, una fiscalidad única, una política exterior única y, claramente, un ejército común.

Ciertamente algo hemos conseguido pero, ante las potencias emergentes como la China, el neoimperialismo ruso, la guerra islámica en el patio de casa, millones de refugiados que llaman a nuestras puertas, unos Estados Unidos siempre más alejados de Europa y más interesados al comercio con la China, un continente africano abandonado a su destino explotado por las multinacionales, basurero de Occidente, tablero de correrías de las bandas terroristas islámicas de Boko Haram o ISIS o Al Qaeda...¿Europa que hace?

Europa no hace absolutamente nada. Y si que la miseria, la hambruna, el terrorismo, las guerras, los millones de refugiados, los tiene como se suele decir EN EL PATIO DE CASA.

La Unión Europea actual no se está pareciendo en nada a los Estados unidos, más bien se parece a la Europa anterior al Renacimiento.

Europa es hoy un príncipe hermoso que tiene su bolsa llena de euros, que puede atravesar su reino sin fronteras visibles, o sea un príncipe azul sin cetro, corona ni espada ya que carece de un poder real, de una política exterior única y ni siquiera dispone de unas fuerzas armadas coordinadas.

Entre tanto la situación en el patio de casa se va haciendo explosiva sin que Europa decida nada.

¿Puede una potencia teórica como Europa no tener un proyecto claro de cooperación y desarrollo con la otra orilla del Mediterráneo, el norte de África, los países subsaharianos?

Una política de ese tipo puede ser que resultara cara, que con el tiempo se amortizaría, pero seguramente mucho más caro e insostenible es que las personas de la otra orilla del Mediterráneo, presas de la desesperación, emigren en masa a la parte norte del Mediterráneo.

¿Puede Europa no mover ficha ante el terrorismo y las guerras provocadas por ISIS y la guerra de siria, Libia e Iraq No hacer nada?

¿Debe Europa siempre delegar en los estados unidos para aquello que ocurre en el patio de nuestra casa?

No puede delegar y los estados unidos se encogen de hombros ante un problema que está en nuestra casa, no en la suya.

Quizá una política europea decidida a acabar con el ISIS debería ponerse de acuerdo con Rusia y no con los estados Unidos. Rusia en realidad tiene también el conflicto muy cerca del patio de su casa.

Se me dirá que las mías son meras elucubraciones insostenibles, pero a veces solo abrimos los ojos cuando la realidad nos golpee directamente con una bomba atómica de fabricación casera o también bacteriológica en París, Londres, Roma o Madrid.

Entretanto cuatro millones de prófugos de la guerra del sur del Mediterráneo son un desastre humanitario solo comparable con la posguerra de la Segunda Guerra Mundial.

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