viernes, 10 de abril de 2015

JE SUIS CRISTIANO. YO SOY NEGRO. YO SOY AFRICANO.YO SOY DE KENIA.




-YO SOY CRISTIANO. YO SOY NEGRO. YO SOY AFRICANO.YO SOY DE KENIA.
La barbarie se está apoderando de una parte del mundo.

Ciertamente no es la primera vez que se asesina en masa por la religión o la etnia. Los nazis de la Segunda Guerra Mundial asesinaron a seis millones de personas porque eran judías.

El mundo entero con horror al ver los millones de cadáveres en los campos de exterminio dijo NUNCA MÁS.

La verdad es que sobre el exterminio nazi eran muchos los que sabían y no hicieron nada por evitarlo. A comenzar de los mismos aliados que tenían fotografías aereas de los trenes de la muerte que llevaban las víctimas hacia los campos de exterminio y no hicieron nada para evitarlo. Basta que hubieran bombardeado las vías que ese asesinato de masa no se hubiera podido cometer.

Ahora Estado Islámico, que podemos considerar el movimiento nazi resucitado, entiende exterminar a los cristianos, y hay que decir que lo está haciendo con total impunidad en Siria, Iraq, Egipto, Nigeria, Tunez, Kenia... y hasta incluso, en grado de tentativa, en Cataluña donde proyectaban asaltar edificios públicos y tomar rehenes para degollarlos aquí en Europa.

La masacre de 148 jóvenes cristianos en la Universidad en Kenia ha sido horroroso, un crimen abominable como el de los nazis en Treblinka o cualquiera de los campos de exterminio.

Sorprende el hecho de que tan espantoso exterminio no hgaya sido condenado, ni haya habido manifestaciones de protesta, ni hayan acudido jefes de estado a los funerales.

EN OCCIDENTE HAY UN SILENCIO CÓMPLICE DE ÉSTOS CRÍMENES.

El papa Francisco ha lamentado que los países civilizados hayan mirado hacia otra parte.

Recuerdo el poema de Bertold Brecht. Cuando vinieron a buscar a los comunistas, sindicalistas, católicos, judíos...él no hizo nada porque no era comunista, sindicalista, católico, judío...y cuando llegaron a por él, no quedaba nadie para protestar.

Me parece éticamente aborrecible que todos nos hayamos indignado por diez periodistas blancos asesinados en París y nos de igual 148 jóvenes negros cristianos en Kenia.

Y ahora digo.

Yo soy cristiana.

Yo soy negra. Yo soy de Kenia.

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