NOSOTROS
QUE FUIMOS LOS JOVENES DEL 68, PEDIMOS AHORA SER DEFENDIDOS P0R UN
MINISTERIO DE LA VULNERABILIDAD.
Visto
que muchos de los que hoy somos personas mayores o CABEZAS BLANCAS,
somos aquellos de la famosa rebelión del 68, creo que debamos
renovar nuestras energías para iniciar un nuevo 68 de cabezas
blancas.
Hay
sobre todo que expresar nuestra profunda indignación por haber sido
en esta pandemia CARNE DE CAÑÓN, se nos ha dejado morir en
residencias-lagers y hospitales ante la indiferencia total de
nuestros políticos que no se han ocupado para nada de nosotros y que
incluso, perdonen la malicia, habrán pensado que muertos no les
íbamos a votar y que se iban ahorrar un pastón de pensiones y
medicinas.
Las
personas mayores hemos sido COSIFICADAS, considerados números de una
macabra estadística, se nos ha dejado morir peor que a mascotas
abandonadas, sin el cariño de nuestros familiares, nuestros cuerpos
o cenizas se han perdido en la burocracia y nuestros familiares no
nos encuentran ni muertos.
Aquellos
que hemos sobrevivido a la Masacre de los Inocentes de este nuevo
Herodes llamado Estado, ahora vivimos encerrados en nuestras casa
porque según esos tipos del Estado “no quieren poner en riesgo
nuestra salud”, lo cual parece una broma macabra. Ni siquiera
tenemos en ésta nuestra cárcel un patio como tienen las prisiones
serias para que los encarcelados tomen el sol.
Pasaron
los siglos en que los mayores eramos los SENIORS O SENADORES,
aquellos que el Estado consideraba mas sabios y se hacía parte del
SENADO.
Hoy
aquellos que quedamos vivos queremos una NUEVA IMAGINACIÓN AL PODER
como decíamos en el 68 e invitamos si queda algún político decente
que constituya en los Gobiernos un MINISTERIO DE LA VULNERABILIDAD.